Que no se pierda el asombro

1 En ese momento los discípulos se acercaron a Jesús y le preguntaron:—¿Quién es el más importante en el reino de los cielos? 2 Él llamó a un niño y lo puso en medio de ellos. 3 Entonces dijo: — Les aseguro que a menos que ustedes cambien y se vuelvan como niños, no entrarán en el reino de los cielos. 4 Por tanto, el que se humilla como este niño será el más grande en el reino de los cielos. 5 »Y el que recibe en mi nombre a un niño como este, me recibe a mí. 6 Pero, si alguien hace pecar a uno de estos pequeños que creen en mí, más le valdría que le colgaran al cuello una gran piedra de molino y lo hundieran en lo profundo del mar.

Que no se pierda el asombro

Rev. David Espíndola

Entradas relacionadas
Deja tu comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada.Los campos obligatorios están marcados con *