Sabemos que sin importar la edad todos necesitamos la guía de Dios, por eso tenemos prédicas enfocadas a nuestro ministerio dirigido a adultos mayores que han entrado en los años dorados de su vida
Él mismo, en su cuerpo, llevó al madero nuestros pecados, para que muramos al pecado y vivamos para la justicia. Por sus heridas ustedes han sido sanados.
Tengan todos en alta estima el matrimonio y la fidelidad conyugal, porque Dios juzgará a los adúlteros y a todos los que cometen inmoralidades sexuales.