Mientras haya entre ustedes celos y contiendas, ¿no serán inmaduros? ¿Acaso no se están comportando según criterios meramente humanos? 1ª Corintios 3:3b.
La humanidad entera ha experimentado los beneficios de la unidad y las consecuencias de la división. La unidad que bendice genera alegría, prosperidad, y desarrolla al máximo la capacidad individual de cada miembro de la familia una sociedad y una nación.
La causa principal de la división familiar, es la debilidad espiritual de las personas. Cuando no se vive con valores espirituales y morales, lo que gobierna es el egoísmo y el orgullo. La unidad solo se puede sostener sobre criterios y principios espirituales bíblicos.
«En los últimos tiempos habrá burladores que vivirán según sus propias pasiones impías» Estos son los que causan divisiones y se dejan llevar por sus propios instintos, pues no tienen el Espíritu. Pero ustedes, queridos hermanos, edificándose sobre la base de su santísima fe y orando en el Espíritu Santo. Judas 1:18-20.
Como creyentes debemos modelar con el ejemplo a nuestras familias extendidas de parte y parte de cada cónyuge. Si tu familia no es creyente, ora por ella, ten misericordia y siempre dales ejemplo con amor para traer unidad en la variedad. Si tu familia es creyente, aprovecha y da gracias Dios para generar unidad que impacte a otras familias.
También es importante que generemos espacios de unidad para que con nuestro ejemplo puedan ver que sí es posible vivir en armonía y amor cuando Cristo está en el centro. Por nuestros frutos nos conocerán, así que seamos intencionales en rodear con oración a la familia extendida sean creyentes o no, y estar prestos a perdonar, ser generosos, a prodigar amor y de este modo, dar ejemplo a nuestros hijos para que seamos testimonio real de nuestra vivencia como creyentes.
Reto:
Esta semana ora por tu familia extendida, y piensa que acciones así sean pequeñas, debes empezar para traer unidad y mostrar amor, de ese que recibimos diariamente del cielo.
Oremos:
Amado Padre celestial, gracias por ser nuestro ejemplo de unidad, y amor; ayúdanos a prodigarlo a nuestra familia extendida con el perdón y la misericordia que tú mandas. Te pedimos que como familia podamos ser ejemplo de unidad, paz, gozo y bondad. Perdónanos si hemos causado divisiones familiares y ayúdanos a caminar con la premisa de vida de llevar unidad a nuestras familias primarias y extendidas. Amén.