1¡Ay de la ciudad sedienta de sangre, repleta de mentira, llena de rapiña, aferrada a la presa! 2¡Se oye el chasquido de los látigos, el estrépito de las ruedas, el galopar de los caballos, el chirrido de los carros,3 la carga de la caballería, el fulgor de las espadas, el centellear de las lanzas! ¡Son muchos los muertos, los cuerpos amontonados, los cadáveres por doquier con los que todos tropiezan! 4Todo por el deseo desenfrenado de una prostituta seductora, maestra en hechicerías. Esclavizó naciones con su prostitución, y pueblos, con su brujería.
Diác. John Alfonso