Por esto, despójense de toda inmoralidad y de la maldad que tanto abunda, para que puedan recibir con humildad la palabra sembrada en ustedes, la cual tiene poder para salvarles. No se contenten solo con oír la palabra, pues así se engañan ustedes mismos. Llévenla a la práctica. El que escucha la palabra, pero no la pone en práctica, es como el que se mira el rostro en un espejo y después de mirarse, se va y se olvida enseguida de cómo es. Pero quien se fija atentamente en la ley perfecta que da libertad y persevera en ella, no olvidando lo que ha oído, sino haciéndolo, recibirá bendición al practicarla
Conoce estas pautas que te ayudarán a conocer a profundidad la palabra de Dios y permitir que examine profundamente tu vida.
- Darle la bienvenida a la palabra con un corazón arrepentido, Santiago 1:21
- Darle la bienvenida a Dios con un corazón abierto. Santiago 1:21
- Darle la bienvenida a la palabra de Dios con un corazón aplicativo. Santiago 1:22
- Darle la bienvenida a la palabra con un corazón atento. Santiago 1:20-25