40»Ahora, Dios mío, te ruego que tus ojos se mantengan abiertos y atentos tus oídos a las oraciones que se eleven en este lugar. 41»Levántate, SEÑOR y Dios; ven a tu lugar de reposo, tú y tu arca poderosa. SEÑOR y Dios, ¡que tus sacerdotes se revistan de salvación! ¡Que tus fieles se regocijen en tu bondad!
Rev. Eduardo Rojas
- Bondad en el templo. 2 Crónicas 6:40-41
- Bondad en el país. Nehemías 9:25
- Bondad en la vida terrenal. Salmos 27:13
- Bondad como testimonio. Salmos 31:19